lunes, 29 de diciembre de 2014

Se fue niño y volvió hombre

Los lunes por lo general me gustan nada, pero este ha empezado siendo bueno. Despertarte y ver que el Atleti ha hecho oficial el regreso de 'El Niño', de Fernando José Torres Sanz, ese jugador tan admirado como criticado y con un corazón rojiblanco. 

No voy a llamarle ídolo porque creo que las cosas las consigue un equipo no un solo jugador (obviamente tengo jugadores que me gustan más pero ídolos como tal no) pero no puedo negar que este canalla es un jugador más especial que los otros, ha sabido ganarnos y llevarnos en su rojiblanco corazón. Soy consciente que Torres no está en su mejor momento, y que a lo mejor no está en estos instantes para jugar semana tras semana 90', pero que queréis que os diga a mi su regreso me hace muy feliz, y no llego a comprender que haya gente que no se alegre del regreso del que nos ha dado tanto, al igual que tampoco comprendo a los que quieren quitarle el 9 a Mandzu y la capitanía a Gabi para dárselos a Torres. Estoy segura de que en estos momentos lo que de verdad necesita Torres es a un Cholo, alguien que le devuelva el tono y la confianza, y que volverá a darnos alegrías a todos los colchoneros. 

En estos momentos mientras sigo asimilando que es verdad y no una inocentada que por fin ha vuelto, vienen a mi cabeza mil recuerdos. Al lado de mi cama tengo desde hace ya unos 6 años un póster de Fernando y su gol contra Alemania, día tras día al levantarme lo veo y aún recuerdo como viví ese momento hasta que el balón del niño besó la red, esos nervios y la alegría de ver ganar un trofeo a mi selección y gracias al gol de un jugador de mi equipo. La final de la otra eurocopa, donde fue o pichichi y marcó también en la final además de regalar un gol a mata ( Aún recuerdo como dijo que le cedió el gol porque lo necesitaba y era bonito verle sonreír). Llevaba allá donde iba al atleti, ya fuera con bufandas o banderas en las celebraciones o simplemente recordándonos y animándonos. También estuvo con el atleti en momentos no tan buenos en segunda, ayudó a volver a primera, hasta que un día llegó la hora de que partiera rumbo a Liverpool para compartir vestuario con Gerrard, donde lo dio todo y vimos su mejor versión, después aterrizó en Chelsea con no tan buen pie, después a Milán donde por fin el círculo se cierra y vuelve a casa, su lugar.

Regresa, pero faltan algunas personas para verlo, Aragonés, mi abuelo futbolístico al igual que el de muchos, ojalá que allá donde quiera que esté pueda ver el regreso y darle mucha energía y fuerzas para que disfrutemos del gran niño en el campo y quien sabe que marque algún golito a los vikingos o culés para empezar bien. No quiero poner un testamento más largo,  simplemente ¡Bienvenido a tu casa niño! Calla la boca a quien te llama cojo o viejo.